La roca espacial, denominada 2012 DA14, de 45 metros de diámetro, pasará a una distancia de sólo 27.600 kilómetros de la Tierra, aún más cerca que algunos de los satélites artificiales enviados por la humanidad al espacio.
Los astrofísicos revelan que se trata de una aproximación récord: será el asteroide más grande que se acerque tanto a nuestro planeta desde que la agencia espacial empezó a seguir a este tipo de cuerpos celestes en los años noventa.
El científico Don Yeomans, del programa de objetos cercanos a la Tierra en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL por sus siglas en inglés) de la NASA, estima que un asteroide del tamaño similar al del 2012 DA14 sobrevuela la Tierra, como promedio, una vez cada 40 años, y sólo se estrella contra ella una cada 1.200 años aproximadamente.
“Definitivamente, el 2012 DA14 no chocará contra la Tierra. La órbita del asteroide se conoce lo suficientemente bien para descartar un impacto”, subraya Yeomans. A pesar de esa seguridad, los radares de la NASA seguirán a la roca espacial en su aproximación a la Tierra.
Durante los momentos de máxima aproximación, que se producirá, según los pronósticos, a las 20.30 horas (GMT) del 15 de febrero, el asteroide brillará como una estrella de magnitud 8, por lo que será visible con un telescopio de aficionado.